Cuatro hábitos que debes mantener si quieres mejorar tu vida

«El poder no está en los hábitos sino en cuánto tiempo se mantienen estos«, es una frase de Raimon Samsó, escritor y coach especializado en formar a expertos con conciencia, autor de El código del dinero y conferencista motivacional.

Como ya lo he mencionado anteriormente el hábito se adquiere por la repetición constante con el paso del tiempo, algunos se mantienen y otros se van dejando. Ahora bien, un mal hábito estamos de acuerdo que no lo vas a echar de menos ¿verdad?, pero siempre habrá que mantener los buenos e ir adquiriendo los nuevos que aporten algo positivo.

A continuación, te comparto algunos tipos que pueden ayudarte a mejorar diferentes ámbitos de tu vida:

Hábitos físicos. Son los que más se desean llevar a cabo, pero al poco tiempo se abandonan por todas las razones que seguramente ya has argumentado o escuchado. El estilo de vida sedentario, la mala alimentación, la comida con pocos valores nutritivos, las prisas, tabaco, alcohol, desvelos…deberían prender una alarma para no abandonarlos, pues lo que buscan es que cuides tu salud. La práctica de una rutina moderada garantiza un bienestar en general, mayor concentración, incrementa la autoestima y muchos beneficios más que deberían ser prioritarios porque de este modo se previenen múltiples enfermedades cardiovasculares. No se necesita ser un atleta, basta con que camines 30 minutos al día y que incluyas frutas y verduras en tu dieta para que empieces a notar resultados, pero empieza ahora y haz que sea algo permanente.

Hábitos afectivos. Nacen de los sentimientos de las personas y básicamente son universales como la alegría, tristeza, miedo, sorpresa, furia y rechazo; otros más se empiezan a desarrollar conforme se van adquiriendo los cognitivos. El llegar a algún lado, sonreír y saludar, son ejemplo de estos hábitos. Crear hábitos afectivos tiene que ver con estar predispuesto a entablar lazos con otros sujetos, sean de amistad, de amor o de compañerismo.

Hábitos sociales. Permiten expresar los sentimientos, actitudes, deseos u opiniones de modo adecuado a la situación en la cual el individuo se encuentra mientras respeta las conductas de los otros. Así, nos hacen mejorar nuestras relaciones interpersonales, sentirnos bien, obtener lo que queremos y conseguir que los demás no nos impidan lograr nuestros objetivos. Seguramente te has encontrado con personas que dices “este cuate no sabe escuchar”, lo que significa que mantiene el hábito social de no prestar atención. Asertividad, empatía e inteligencia emocional son los que más se requiere tener hoy en día.

Hábitos intelectuales. Buscan que la persona sea mejor a través del conocimiento pues todo ser humano debe potenciarlo para mejorar sus capacidades. Es todo aquello que incide en la educación de las personas, por ejemplo, si fomento la lectura, me ayuda, pero sí prefiero pasar horas y horas frente a una pantalla, en realidad solamente me estoy distrayendo, por tanto, debería construir el hábito de dedicarle más tiempo a la primera actividad que a la segunda.

Recuerda siempre: Cambia la depresión, enojo y obsesión por hábitos virtuosos para ser feliz y contagiar felicidad.